Rosácea: Tratamiento con láser IPL
La rosácea es una enfermedad crónica de carácter inflamatorio que afecta a la piel de la cara principalmente, aunque también puede afectar al cuello o al tronco. Es más común en las mujeres aunque también afecta a los hombres y aunque puede presentarse a cualquier edad es mucho más frecuente una vez cumplidos los treinta años.
Existe para la rosácea tratamiento dermatológico muy variado. Pero para eliminar esas lesiones vasculares lo que mejor funciona hasta el momento es el láser.
El láser para la piel rosácea
El láser IPL se conoce también como luz pulsada intensa y quizás sea el nombre más adecuado ya que no es un láser propiamente dicho. Es uno de los tratamientos utilizados para tratar la rosácea a nivel estético. Es muy adecuado para tratar los capilares más pequeños que se han dilatado y se transparentan.
La luz pulsada actúa directamente atraída por la hemoglobina de la sangre de estos capilares, por lo que actúan principalmente sobre ellos causando minúsculos derrames que son reabsorbidos rápidamente por la piel.
El dermatólogo será quién determine cuántas sesiones necesitará cada paciente. Lo normal es que estén entre seis y ocho. Dichas sesiones deben de espaciarse aproximadamente dos meses porque es el tiempo que le llevará al organismo reabsorber el capilar que ha sido coagulado.